INGREDIENTES
- ½ kilo de judías verdes
- 100 gramos de jamón serrano en taquitos
- 1 cebolla pequeña
- 2 dientes de ajo laminados
- 60 gramos de pimiento rojo
- 2 huevos
- Aceite
- Sal
PREPARACION
Con un pelador o un cuchillo, sacamos finas tiras de judías verdes.
Ponemos agua, sal y una pizca de bicarbonato, que intensa el color verde y no aparta sabor, y cuando esté hirviendo incorporamos las judías y las dejamos 4 minutos hasta que estén al dente, las escurrimos y reservamos.
En una sartén con aceite pochamos la cebolla y el pimiento en cuadradaditos pequeños, y los ajos laminados. Una vez pochada la verdura añadimos las judías verdes y los taquitos de jamón dejando cocinar durante un par de minutos.
En un cazo con agua vinagre y sal escalfamos los huevos. Una vez que el agua esté casi hirviendo echamos los huevos hasta que cuaje la clara alrededor de unos tres minutos. Retiramos los huevos con la ayuda de una espumadera y los retocamos para retirar las barbas de la clara que hayan podido quedar. Para escalfar los huevos ponemos 10 ml de vinagre por cada 100 ml de agua.
Emplatamos en una cazuela con las verduras y el huevo en el centro.
Las judías verdes tienen pocas calorías, pues en su composición hay un alto porcentaje de agua y apenas contiene grasa. El resto está constituido por hidratos de carbono y una pequeña proporción de proteínas que la convierten en un alimento de fácil digestión. Además, cuenta con un notable aporte en fibra. Estas virtudes se ven reforzadas por su poderoso efecto diurético, gracias a su riqueza en potasio y su bajo contenido en sodio.
La judía verde es rica sobre todo en vitamina C, aunque también en vitaminas del grupo B, como la B6 y la B9 o ácido fólico.