El martes 24 tocaba tarde de merienda y decidimos ir a San Fernando, ya que hay buenos pasteles.
Parada obligatoria es la «Pastelería Victoria» famosa como ella sola desde que fue fundada en 1914. Y famosos son sus roscos de Semana Santa, que junto con las tartas de bizcocho y merengue (la de las bodas y comuniones), son los Puntales estrellas de ésta pastelería isleña. El olor a clavo perfuma el ambiente mientras hacemos acopio de rosco y más roscos. Y la tarta también , y los saladitos, que no falte nada.
Esta pastelería está regentada por Diego y Francisco del Águila, nietos de los fundadores del establecimiento. Tienen otra pastelería, «La Nueva Campana», en c/ Rosario, n° 83, con la misma variedad de pasteles.
Tenemos que volver otro día, porque todo esta delicioso, no nos extraña la cola que hay siempre para comprar estos pasteles.
