Ingredientes
- 3 cucharadas de mantequilla
- 3 cucharadas de harina
- 250 cc de leche
- 150 gramos de queso de Gruyere
- 3 yemas de huevo
- 2 claras de huevo
Preparación
Precalentar el horno a 180º C.
Derretimos la mantequilla en una sartén, y añadimos la harina hasta que forme una masa que no se pegue, incorporamos la leche y el queso troceado, y por último las yemas, dejando que se unan todos los ingredientes y quede una masa compacta. Batimos las claras y se la incorporamos con movimientos envolventes para que no baje.
Untamos un molde con mantequilla y un poco de harina. Vertemos la preparación y horneamos durante 30 minutos. Nunca abrir el horno hasta que el soufflé no haya subido. Servir inmediatamente evitando que baje el soufflé.
El origen del soufflé se data de la cocina de finales del siglo XVIII y principios del XIX. Es un delicado plato que aparece en los grandes hoteles y restaurantes europeos.
La palabra soufflé proviene del participio pasado del verbo francés Soufflér que significa soplar o inflar.
El soufflé se suele servir como plato principal o bien como postre en versión dulce, este último a veces flambeado.