Como es costumbre nos reunimos a comer para celebrar un año mas no solo como grupo gastronómico sino – sobre todo- como amigas.
Llevamos mucho tiempo juntas y en nuestras vidas han pasado cosas buenas y malas que nos han unido porque sabíamos que siempre todas las compañeras estarían allí, dispuestas a compartir nuestra alegría o ayudarnos a superar las penas.
Empezamos todas muy jóvenes, trabajando fuera de casa y con niños pequeños siempre pegados a los talones, sin apenas tiempo para tomar un café con las amigas. A pesar de todo guardábamos un ratito para reunirnos y probar alguna receta nueva recién descubierta aunque tuviéramos que cargar con los mocosos.
Hemos editado dos libros, participado en decenas de rutas, organizado meriendas pantagruélicas en las que mezclábamos lo dulce y salado aprovechándonos de nuestros jóvenes estómagos, asistido a jornadas, dado conferencias ,editado un blog……en fin todas esas cosas que se espera de un grupo gastronómico activo e implicado en la gastronomía de su ciudad y su provincia. Pero sobre todo entre canapés, bizcochos, salsas y carnes rellenas hemos puesto los cimientos de una gran amistad que es el logro más importante de nuestro grupo.